Mucho se habla de fomentar la creatividad de los niños, pero la realidad es que muy pocas personas saben cómo hacerlo. Uno de los consejos más sencillos, y efectivos, es introducir a nuestro niño en la experimentación y el juego. De esa manera, los más pequeños aprenderán sobre el arte en actividades que les resultan divertidas y despertarán su capacidad de observación.
En el siguiente texto te hablaremos de algunas maneras sobre cómo nuestros niños podrán aprender de artes, a la vez que se divierten y comparten tiempo contigo. Este tipo de manualidades desarrollarán de gran manera su creatividad y los harán pasar un excelente rato.
Collage
El collage es el arte de crear en el desorden. Aunque parezca algo ilógico o contradictorio, la verdad es que todos nos hemos encontrados rodeados de revistas o libros de imágenes y no sabemos qué hacer con ellos. Ahora bien, grandes artistas han dedicado parte de su carrera a convertir aquellos materiales en una forma artística única y hermosa.
A los niños les encanta recortar, pegar, crear imágenes a partir del desorden. Matisse definiría el collage como “dibujar con tijeras”. Por eso, proponemos dicha actividad, porque, además de sencilla, se presta para crear obras supremamente originales. Los niños pequeños amarán el recortar y pegar. Procura que ellos hagan la mayor parte del trabajo, pero mantente pendiente por si necesitan un poco de ayuda.
Igualmente, si quieres incluir a tus hijos un poco más grandes, lo que puedes hacer es subir el nivel de dificultad. Incluye otros materiales como acuarelas y pídeles que cuenten una historia con los materiales que tienen a disposición. Te aseguramos que los resultados te sorprenderán.
Cubismo
La técnica del cubismo fue popularizada por Pablo Picasso, y se encarga de descomponer las figuras en la obra, ofreciendo de esa manera diferentes puntos de vista. Basándonos en ello, podemos pedirle a nuestro niño que dibuje diferentes pares de una personas, por ejemplo, los ojos, la nariz, boca y orejas en distintas posiciones. Explícale que no necesitan tener una coherencia, para ello puedes dibujar algo primero que les sirva de guía.
Después, tendrá que dibujar la silueta de una cabeza, para pegar en ella las distintas partes del rostro que ya tienes a la mano. Este tipo de técnica hará que nuestro niño comprenda que hay diferentes formas de ver la realidad. A partir de aquí, la forma en que se exprese vendrá de su interior y comenzará a tener su propia voz.
Abstracción lógica
Quizá por el nombre creas que es algo supremamente complejo, pero la verdad es que lo es. En este tipo de técnica, debemos utilizar la geometría pura. Las curvas no tienen nada que hacer en este tipo de obras, solamente las formas geométricas formadas por colores primarios. Para los niños será muy interesante utilizar este tipo de elementos para crear un mundo extraño y encantador.
Los colores, la posición de los cuadrados, los triángulos y todas las formas que uses, además de la imaginación desbordada de los más pequeños harán de dichas obras algo original, interesante y muy divertido de realizar.
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